La Deuda, La Toga, ProCrear y los Pibes.

El arreglo con los bonistas respecto de la catastrófica deuda heredada por la pesadilla Macrista fue una bocanada de aire para el Tándem frentetodista que venía espadeando el asunto desde el mes de marzo. Monedas mas monedas menos finalmente se acordó el pago de 50 y tantos de centavos de dolar por cada billete verde entregado a ojos de cielo y su pandilla.

Independientemente de nuestro deseo de cagarnos categóricamente en una trampa financiera que data de principios del siglo XVI con las deudas inglesas a los países nacientes dentro y fuera de su órbita colonial, la realidad es que a menos que aceptemos que la democracia burguesa es una farsa y adoptemos la consecuente decisión de degollar banqueros y asaltar el palacio de invierno universal, las reglas sobre la mesa son impuestas sin mucho margen de acción o decisión al respecto.
En el actual esquema no había muchas mas alternativas que un arreglo que pateara la pelota hacia adelante y prometiera un esquema de «pagos sostenibles» para mantener el barco a flote.
Ahora bien. Una vez acomodado el fantasma de la cancelación de pagos internacionales y el cierre de la canilla de divisas, si la salida (en caso de la que la haya) de una pandemia mundial sin precedentes no es un momento clave para la discusión estructural del sistema. ¿Cuando lo va a ser?
Si el elenco gobernante quisiera, por obra y gracia de vaya a saber quien, sentar las bases de una autentica independencia soberana, es hora de dejar el muerto de la deuda externa donde corresponde: enterrado.

La deuda externa no es UNA deuda, es una sumatoria interminable de deudas que se superponen permanentemente, algunas mas fraudulentas que otras. Desde la maratónica deuda a 100 años de Mauricio Macri que ni siquiera paso por el Congreso Nacional, echo suficiente para considerarla invalida de cabo a rabo, pasando por las estatizaciones de Cavallo and company leoninas como contrato echo en servilleta, hasta la primigenia deuda de la Baring Brothers en 1824 con la firma de Rivadavia como Ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, se viene ejecutando una estafa permanente y criminal al pueblo de Argentina con escasísimos momentos de sacudón y dignidad.
Una de las trampas es la sintaxis, como siempre. Al hablar de «deuda externa» se olvida que se habla de «deuda pública». Si la misma es pagada con fondos públicos, pública es la deuda. Pero no puede serlo, si no hay un «público» beneficiado por la misma. Y si alguien puede demostrarme fehaciente mente que el pueblo argentino fue beneficiario de la deuda «externa», me como mi teclado en vivo y en directo.
Entonces: ¿esta mal hablar de «deuda externa»? No. Por que aunque haya responsables criollos en la firma de las mismas, como el capitalismo y la viruela, la deuda también vino de afuera, y hacia afuera drena las riquezas, sangre sudor y lágrimas de este pedazo de tierra bajo el sol.
Entonces estamos hablando de una deuda externa que se hace pública para beneficios privados en detrimento del pueblo.
¿Hasta cuando vamos a desperdiciar el privilegio de poseer recursos geográficos, energéticos y minerales válidos para el ejercicio de la autosuficiencia?
¿Que somos? ¿Giles?

Hablando de giles, el tren fantasma del neoliberalismo new age conocido con el sello de Juntos por el Cambio, bolsa de gatos que aglutina peronistas conversos, macristas llanos y radicales inmunodeficientes se apuró a salir a rechazar de plano una reforma judicial que todavía no se había presentado, una versión rioplatense de Sprinfield.
Tato Bores decía: «pobre de la generación cuyos jueces merecen ser juzgados». Pues bien. ¿Quien podría amagar a decir que no estamos jodidos re jodidos? Hay un numero que es categórico. Al rededor de 80 de cada 100 personas presas en la Argentina no tiene condena firme y sus juicios son montañas de papeles que duermen el sueño eterno entre polillas y funcionarios judiciales.
La reforma judicial en la Argentina es una necesidad imperiosa de cualquier Estado de Derecho que se jacte de tal. Ya que dinamitarla y empezar de nuevo, tristemente no pareciera ser una opción, reformarla para que deje de ser un órgano de gobierno atrofiado, reaccionario y en concurso de acreedores permanente, es urgente.
Si no hay justicia, que no haya nada entonces, alma mía.
Juegan a «primero yo» y después a «también yo» Y a «las migas para mí» y cierran el juego porque ya saben que… el tonto nunca puede oler al diablo (vida mía!) ni si caga en su nariz...

El Procrear, aunque bancarizado, tibio e insuficiente, es de las conceptual mente mas acertadas políticas públicas destinadas a la gente de a pie de los últimos años. La analogia de «cumplir un sueño» suele repetirse mas veces que la del «ejercicio de un derecho», aún cuando la adquisición de una vivienda familiar tiene que ver mas con la segunda que con la primera. Pero para salir del tirapiedrismo facilista, cabe decir que por la composición del elenco gobernante y la puesta en escena de ciertos hombres y mujeres fogeados en la gestión territorial o los claustros universitarios, quizás nunca como ahora estuvo tan tangible la posibilidad de realizar una política de desarrollo territorial, geográfico, urbanístico y habitacional que de vuelta la taba de la sobrepoblación bonaerense y derive en´la ocupación efectiva de un país proporcionalmente inmenso y ridículamente vacío. Dato. en el 10% del territorio nacional vive el 40% de la población.
Las tierras fiscales y ociosas en manos del Estado son harto suficientes para el plan de relocalización mas ambicioso de nuestra historia. Pero no se trata solo de mudar muebles y personas. ¿Como se discute y se pone en practica un modelo de producción sustentable de alimentos si la tierra esta vacía y nadie la produce? ¿Como se evita que la miseria echa carne que produce el hacinamiento urbano y la falta de trabajo no derive en poblaciones de jóvenes pobres que llenan cárceles y calabozos las mas de las veces por el solo echo de ser pobres? ¿No es obvio pensar que la posibilidad tangible de una vivienda que garantice un proyecto de vida decente cambiaría radicalmente la desigualdad y la violencia que asola a la especie?

  1. Re-discutir como se hace y como se reparte la riqueza producida en este suelo rico e injusto como buena tierra de dios.
  2. Como y cuales son los mecanismos y ejecutores del andamiaje que debe impartir justicia, que de base significa que a cada cual le toque lo que le corresponde.
  3. Soltar la correa del centralismo metropolitano y repartir la autentica torta antes de que sea tarde.
    Si repartir la tierra y un techo digno para quienes nacen bajo este sol suena a demagogia comunista, quizás debamos repensar algunos conceptos antes de que sea tarde. De no hacerlo, entre muchas otras cosas, seguirá inevitable el derrotero de los Luciano Arruga, los Santiago Maldonado, los Lucas Veron y los Facundo Castro asesinados en manos policíacas.

No va a ser gratis, pooles de siembra, emperadores de la timba financiera y prominentes plutócratas globalistas mantienen una pesada bota sobre nuestros hombros, deuda externa, jueces corruptos, miseria planificada y policías criminales mediante. Quienes hoy ejercen el Gobierno, decidirán si pasan a los anaqueles de la historia como buenos gerentes del staus quo o se disponen a dar una pelea poder el poder real, y ahí se verá de que esta echo cada une. Mientras mas alto trepa el monito es así es la vida, el culo mas se le ve.

Colectivo Editorial ZondeTrope